¿Por qué el Nolotil está prohibido en Reino Unido? El efecto grave que puede causar
El fármaco metamizol, comercializado bajo el nombre de Nolotil, está prohibido en varios países incluyendo Reino Unido, Estados Unidos, Australia o la India (tal y como recuerda el medio británico The Guardian). Y, sin embargo, es uno de los analgésicos más comunes en España.
La razón de esta diferencia radica en un efecto secundario que puede producir el uso de este medicamento, como recoge la propia Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS), que en 2018 revisó sus recomendaciones para el uso del metamizol con este motivo: se trata de la agranulocitosis o neutropenia, una rara reacción cuya incidencia no se distribuye deforma homogénea en la población.
Agranulocitosis y metamizol
Según apunta el Instituto Nacional del Cáncer de los Estados Unidos, la agranulocitosis es una enfermedad grave que se produce cuando el número de granulocitos (un tipo de glóbulos blancos) en la sangre es muy bajo. Hay que tener en cuenta que estas células protegen frente a las infecciones, por lo que esta carencia puede facilitar que se produzcan infecciones muy graves e incluso potencialmente mortales.
Tal y como señala la misma fuente, sus síntomas secundarios pueden incluir fiebre, escalofríos, debilidad, dolor de garganta, llagas en la boca o en la garganta, sangrado de encías, dolor de hueso, presión arterial baja, latidos cardíacos rápidos y dificultad para respirar.
En algunos casos, la agranulocitosis tiene un origen hereditario. Sin embargo, también puede ser una consecuencia de trastornos autoinmunitarios o de la médula ósea, infecciones, desnutrición, ciertas terapias contra el cáncer (notablemente, la quimioterapia y el trasplante de médula ósea) y, como en este caso, la exposición a ciertas toxinas, sustancias químicas y medicamentos.
Complicaciones graves
De esta patología derivarían las complicaciones descritas por la Asociación en Defensa de los Afectados por los Fármacos, que en su página web afirma conocer “al menos 250 casos, de los cuales 80 se han registrado ya con ADAF”.
Concretamente, la entidad defiende que “el Nolotil ha demostrado tener efectos secundarios devastadores, como amputaciones, fallecimientos, reacciones alérgicas graves, choque anafiláctico, agranulocitosis, daño renal o hepático, sepsis, fallo multiorgánico…”.
Un punto interesante, que podría contribuir a explicar por qué algunos estados han prohibido la prescripción del metamizol y otros no, es que tal y como sugiere un reporte de la Agencia Europea de Medicamentos (EMA), existen variaciones interétnicas dramáticas en la incidencia estimada de agranulocitosis como respuesta al uso de metamizol (desde uno de cada 2.000 pacientes hasta menos de 1,1 por millón) que podrían indicar que “el potencial de producir agranulocitosis podría estar asociado a las características genéticas de ciertas poblaciones”.
¿Por qué se da más en el norte de Europa?
Aunque hace tiempo que existe literatura documentando estas variaciones en el riesgo de incidencia del efecto secundario en cuestión, y concretamente una mayor susceptibilidad por parte de personas originarias de Reino Unido, Irlanda y Escandinavia, las razones detrás de esta diferencia continúan siendo un misterio, en tanto que hasta ahora no se sabe con seguridad cuál es el mecanismo por el que el metamizol puede inducir agranulocitosis.
Un estudio publicado en el medio científico Journal of Clinical Pharmacy and Therapeutics en 2019 y recogido por la Biblioteca Nacional de Medicina de los Estados Unidos sugiere que podría deberse a que la complicación se liga a determinadas variantes en unos genes llamados HLA, ya que existen razones históricas para sospechar que las tres poblaciones podrían compartir algunos rasgos genéticos que incluirían esas variantes.
Sea como sea, cabe señalar que el factor clave no ha sido aún identificado, y tendremos que esperar a que se publiquen más investigaciones sobre la cuestión para conocerlo con seguridad. De momento, el metamizol se considera un fármaco seguro si se emplea de acuerdo a sus indicaciones; sin olvidar, por otro lado, que la propia AEMPS recomienda limitar al máximo la duración de los tratamientos, realizar controles hematológicos en caso de tratamiento prolongado, vigilar la aparición de sintomatología indicativa de agranulocitosis y no emplear el fármaco en pacientes en los que no sea posible realizar los controles indicados.
Referencias
Jon Ungoed-Thomas & Sam Jones. ‘They thought I had cancer’: painkiller banned in UK linked to Britons’ deaths in Spain. The Guardian (2023). Consultado online en https://www.theguardian.com/science/2023/nov/26/painkiller-banned-in-uk-linked-to-britons-deaths-in-spain el 28 de noviembre de 2023.
AEMPS (2018). Metamizol y riesgo de agranulocitosis. Consultado online en https://www.aemps.gob.es/informa/notasinformativas/medicamentosusohumano-3/seguridad-1/2018/ni_muh_fv-15-2018-metamizol-agranulocitosis/ el 28 de noviembre de 2023.
Instituto Nacional del Cáncer. Agranulocitosis. Consultado online en https://www.cancer.gov/espanol/publicaciones/diccionarios/diccionario-cancer/def/agranulocitosis el 23 de noviembre de 2023.
ADAF. Justicia para los afectados por el fármaco nolotil. Consultado online en https://www.adafspain.org/es/ el 28 de noviembre de 2023.
European Medicines Agency (2018). Assesment report: Referral under Article 31 of Directive 2001/83/EC (Procedure number: EMEA/H/A-31/1469). Consultado online en https://www.ema.europa.eu/en/documents/referral/metamizole-article-31-referral-chmp-assessment-report_en.pdf el 28 de noviembre de 2023.
Rashmi R Shah. Metamizole (dipyrone)-induced agranulocytosis: Does the risk vary according to ethnicity?. Journal of Clinical Pharmacy and Therapeutics (2019). DOI: 10.1111/jcpt.12768
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Fuente: www.mmmedicalpr.com